Cada año, en la Centro Clínico donde trabajo, realizamos un intercambio de regalos en el mes de Diciembre, justo el día que salimos de vacaciones. En una cartelera, cada uno de nosotros coloca un papelito con el regalo que desea recibir de su “Amigo Secreto!”.
En el 2009, debido a que el regalo que yo pedí excedía 10 veces el monto máximo que habíamos establecido para el regalo, tuve que desistir del Blackberry y cambié mi petición por un libro que me gusta muchísimo. El día del evento podías ver las expresiones de alegría pues cada uno recibió algo muy similar a lo que había esperado. El mío fue exactamente el libro que pedí, y lo he disfrutado muchísimo.
Como siempre me gusta hacer cosas diferentes, este recién culminado 2010, se me ocurrió “NO COLOCAR MI PETICIÓN EN LA CARTELERA!!”…. le hice saber a mi amig@ secret@ que “me sorprendiera con lo que quisiera regalarme”. Y vaya que fue una sorpresa!!
Comenzamos la entrega de regalos, que iniciamos con un divertido juego para seleccionar quién comenzaba. Así se iba develando quién le regalaría a quién. Algunos de nuestros compañeros de trabajo no pudieron asistir porque tenían compromisos previos, y dejaron sus regalos con alguien más. Pero mientras los minutos pasaban y la gran mayoría ya había recibido sus regalos, empecé a tener la extraña sensación que mi amig@ secret@ no había llegado a la fiesta.
Después que todos habían recibido su regalo, una de las secretarias pregunta “faltó alguien por recibir regalo?”…. Adivina qué!! El único que levantó la mano FUI YO!! MI AMIGA SECRETA (en ese momento supe que era mujer) NO FUE A LA FIESTA!! PEEEEEEEEEEERO….. SÍ ENVIÓ MI REGALO!!! QUE ALIVIO!!
Mi amiga secreta resultó ser tan secreta que yo no la conocía personalmente. Era una doctora que tiene poco tiempo en la clínica (y si no es así, entonces va en los horarios que yo no asisto)
El suspenso crecía cuando todos querían saber qué me habían regalado, y empiezan a corear “QUE LO ABRA! QUE LO ABRA! QUE LO ABRA!!”
Así pues, todo emocionado y curioso me dispongo a abrir mi secreto regalo para ver con qué me sorprendería mi amiga secreta. GUAO!! VAYA SORPRESA!!.... mi amiga secreta me obsequió un HERMOSO, HERMOSO PERO MUY MUY HERMOSO………………. COLLAR DE MUJER!.... y de paso todos empezaron a corear “QUE SE LO PONGA!! QUE SE LO PONGA!! QUE SE LO PONGA!!”…
Ya debes suponer que mi amiga secreta tampoco sabía quién era yo, y también que ella pensaba que yo era mujer. Eso me ha pasado ya un par de veces, en las que algunas personas me han escrito emails dirigiéndose a mí como Sra/Srta Franly Agostini.
Dentro de todo el alboroto que causó mi famoso obsequió, bromeando dije: “ME AHORRÉ EL REGALO DE NAVIDAD DE MI ESPOSA!!”, y dentro de mí dije: “POR QUÉ NO FUI MÁS ESPECÍFICO??”.
En este artículo hablaremos justamente sobre SER ESPECÍFICOS AL MOMENTO DE ESTABLECER UNA META/OBJETIVO. La S de la metodología de metas S.M.A.R.T. (ver articulo previo aquí http://tinyurl.com/metas-smart)
Casi siempre comienzo con alguna historia trivial o común, pues todos nosotros en algún momento hemos tenido una situación en la que por no ser específicos, obtenemos un resultado que pueda sorprendernos “graciosamente”. Hoy mi esposa es quien disfruta mi regalo!.
Alguna vez te ha sucedido que vas al supermercado sin una lista (no necesariamente escrita) de lo que vas a comprar, y terminas adquiriendo varias cosas que no pensabas comprar, o terminas también comprando cosas, o alimentos que ya tenías?? Ese es otro ejemplo trivial de lo que puede suceder al no ser específicos, y puede no ser muy “gracioso” tampoco!
Cuando se trata de metas u objetivos que son importantes, es también MUY IMPORTANTE (valga la redundancia) que seas bien preciso en lo que quieres lograr, pues en este tipo de objetivos, no queremos “resultados graciosos”, QUEREMOS RESULTADOS PRECISOS!.
La imprecisión en las metas es una de las razones por las que muchas personas no logran alcanzarlas. El darle a tu mente una instrucción específica, tu cerebro se encarga de poner en marcha los mecanismos conscientes e inconscientes que contribuyen a lograr tu meta.
Alguna vez te habrá ocurrido el llamado fenómeno de “en la punta de la lengua”. Ves alguien en la calle y te dices “Yo l@ conozco, tengo el nombre en la punta de la lengua pero NO RECUERDO SU NOMBRE”. Y mientras insistes en esa frase, tu cerebro ejecuta la precisión de la instrucción que le das: NO RECUERDAS EL NOMBRE!.. y luego de un rato, cuando dejas de insistir en eso, entonces el nombre viene a tu mente.
Una meta ESPECÍFICA es una meta que implica:
1.- “QUÉ” SÍ QUIERES: en vez de establecer “NO QUIERO ESTAR TRISTE/DEPRIMIDO”, establecer entonces por ejemplo “QUIERO ESTAR ALEGRE, ENTUSIASTA, DINÁMICO”. Fíjate que a pesar que la primera declaración pareciera precisa/específica, no te da una idea de lo que cómo SÍ QUIERES estar.
2.- PRECISIÓN: no es igual establecer por ejemplo “QUIERO GANAR DINERO”, “QUIERO BAJAR DE PESO” a decir “GENERARÉ X CANTIDAD DE DINERO VENDIENDO/HACIENDO/TRABAJANDO EN X ACTIVIDAD”, o “QUIERO PESAR 60 Kgs”. De esa forma estas creando en tu mente una representación más exacta de lo que quieres lograr.
Algo muy útil que puedes hacer para darle especificidad a tus metas, es preguntarte “POR QUÉ QUIERO HACER ESO?” o “PARA QUÉ QUIERO HACERLO”, y continuar preguntándote hasta que después de unas 3 o 5 veces, llegarás a un objetivo más profundo, mucho más preciso de lo que quieres hacer. Quizás llegas a establecer un objetivo que no habías contemplado en primer lugar.
Al establecer un objetivo preciso, también puedes establecer las acciones precisas para alcanzarlo. Te sentirás más motivad@ a lograrlo.
TOMA LÁPIZ Y PAPEL PARA PONER EN PRÁCTICA ESTO HOY MISMO! SI QUIERES OBTENER UN RESULTADO DISTINTO AL QUE HAS TENIDO HASTA AHORA, ES ENTONCES MOMENTO QUE EMPIECES A HACER ALGO DISTINTO A LO QUE VENIAS HACIENDO CON TUS METAS! Y así no te quedes con un collar de mujer (si eres hombre) o un reloj de caballero ( si eres mujer) ;-)
Por supuesto, hay otros elementos que una meta debe contemplar, y eso lo iremos conversando en cada artículo dedicado a las siglas S.M.A.R.T
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